jueves, 16 de octubre de 2008

Interludio (1)

Lo que la mayoría de la gente nunca aprende, y hasta a uno mismo se le llega a olvidar a menudo, es que vivimos cabalgando a lomos de un caballo. Y si, a veces se desboca y carga descontrolado. Y cierto, a veces se detiene a pastar.

¡Pero para eso se inventaron las riendas y las espuelas, joder!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No montes ese caballooooo pa pasar de la verdad...Mira que su nombre es muerteeee y que te engancharáaa...

(no me preguntes por que me la se xD)

Necio Hutopo dijo...

Y bueno, también podemos bajarnos del caballo y subirnos a un trasporte un poco menos rejego... Creo...