Antimarketing

El antimarketing es al marketing lo que la antimateria es a la materia. Con una fundamental diferencia: que la impía alquimia de la que son capaces los "creativos" publicitarios en ocasiones logra una blasfema e imposible unión de ambos elementos.

El Antimarketing abunda en campañas publicitarias como la del Seat Exeo, llamada a pasar a la historia gracias a su peculiar slogan "De Aquí al Más Allá".

Pero su hábitat natural es el mundo del cine, donde sólo la existencia del antimarketing explica la creación de determinados productos. Como la secuela del spin-off de una secuela:

Bueno, igual la primera parte tuvo un éxito moderado en Italia.

(y esto quiere decir que para los escribeentradillas de Antena 3 La Momia ahora es una pentalogía, ¿no?)

Pero hay ocasiones en que lo mejor de ambos mundos se une y a una idea desastrosa se le da una capa de barniz de catástrofe.

Por ejemplo: ¿qué es peor idea que encargarle al director de Alien Resurrección hacer un refrito de Alien 3 pero sin alien?

¡Pues anunciarlo en la carátula y prevenir al posible cliente de videoclub despistado, hombre por Diso!

Si es que hay que explicároslo todo, cojones.