Dark Santa Cruz City: Los Ayuntamientos que No Amaban a las Mujeres

Los alienígenas que compraron Santa Cruz hace años para utilizarlo como laboratorio de pruebas para humanos quieren que su objeto de estudio permanezca en un estado lo más dócil posible. Los individuos dóciles dan mejores resultados cuando son sometidos a pruebas psicológicas urbanas.

Es por ello que a pesar de haber adquirido la ciudad mantuvieron en sus cargos a los políticos y gestores que se la vendieron. Todo tenía que aparentar continuidad.

Y nada es mejor síntoma de ello que ver cómo se suben al carro del ataque a la violencia de género, no tomando medidas reales y efectivas, sino llevando a cabo gestos vacios e inútiles (lo contrario sería incocncebible en un político y alertaría a la población de que algo anda mal).

Lamentablemente los alienígenas cometieron el mismo error de todos los grandes villanos: contratar a incompetentes.

Y, puestos a realizar un gesto dedicado a la galería contra la violencia machista, los políticos locales no se molestaron en buscar una víctima local, de las que hay en abundancia, sino que tiraron por la vía fácil.

Se la dedicaron a todas.

Parafraseando a Gila, "os mandamos la placa y ya vosotras os la vais repartiendo".

Pero su incompetencia no se quedó ahí.

No sabiendo dónde emplazar la placa (y probablemente influidos porque no quedaba otro sitio que no estuviera levantado por obras) no se les ocurrió mejor idea que plantarla en el mismo suelo.

En mitad de la Plaza de la Candelaria.

Donde todos los días CIENTOS DE HOMBRES pasan por encima PISOTEANDOLA.

(y probablemente pensando mientras lo hacen "TOMA PLACA PLACA, ZORRA, JO JO JO...")