Oye que sí, que de sus mayores podreis decir lo que querais pero a sus Nuevas Generaciones, por muy bolivarianos y proetarras que seais, les tendreis que reconocer una cosa.
Que al menos el oro lo compran y no lo roban.
Ey, algo es algo ¿no?
Oye que sí, que de sus mayores podreis decir lo que querais pero a sus Nuevas Generaciones, por muy bolivarianos y proetarras que seais, les tendreis que reconocer una cosa.
¿Qué ignota maldad acecha en las entrañas del Cine Acteón?
Pasear por el Parque del Retiro (aparte de un deporte de riesgo) es pasear por la más lustrosa memoria patria.
Y es que incontables son las estatuas que honran la memoria y los hechos de los egregios próceres que han marcado el devenir de nuestra amada España. Merecido homenaje pétreo a esos logros escritos con letras de oro en las páginas de la historia y tan demasiado a menudo olvidados por envidiosos extranjeros y por chavistas compatriotas.
Científicos, políticos, militares, escritores, la lista se hace interminable pero ello no sería excusa para que en ella estuviera ausente Fray Pedro Ponce de Leon.
Tesla versus Edison.
Edison versus Tesla.
Algunas enemistades son tan absolutas, algunos enfrentamientos tan implacables, que no conciben final alguno. Destilan un inimaginable odio cuyo ponzoñoso eco se prolonga más allá de la tumba. Cuya caustica huella atraviesa el velo de los siglos horadando todo aquello que encuentra a su paso.
En perspectiva, los organizadores de la exposición de la Fundación Telefónica quizá debieran haber previsto a la hora de iluminarla...
No hay nada como llegar a una ciudad como visitante, todo bueno rollo y multiculturalismo, y encontrarse en la primera parada de autobús que pisas con un insultante cartel como recibimiento.
Que sí, que vale, que es posible que algún faro de algún rincon del archipielago no estuviera todo lo bien colocado que debiera y eso desencadenara alguna tragedia los dias de niebla.
¡Y claro que los locales luego se echaban a recuperar la carga! ¿Qué queriais, que dejaran que se desperdiciara hundiendose en el mar? Total, los marineros ya no la necesitaban porque ya estaban muertos.
Casi todos.
La mayoría.
Bueno, ya está. Puestos a señalar con dedo acusador...