Lo que ha pasado es muy simple pero puede desencadenar imprevisibles y devastadoras consecuencias.
Pasa que, con aquello de la crisis y la moderación presupuestaria, se ha aplazado indefinidamente el fin del mundo.
Hasta aquí nada raro, ¿verdad?
Pero claro, resulta que la realidad...
...sigue produciendo señales del apocalipsis con el mismo ritmo...
...sin saber a qué extremos de dondevamosapararismo podemos acabar llegando.
De lo único que podemos estar seguros es de que terminaremos deseando que el Universo hubiera llegado a su fin cuando tocaba...
miércoles, 1 de septiembre de 2010
El Octavo Sello
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario