viernes, 11 de junio de 2010

Mujeres Refrigeradas: Jay no es Guay

Los viejos rockeros nunca mueren y los nuevos guerreros nunca se pierden.

Así que, igual que Nova, el supergrupo de los 90 tuvo una segunda oportunidad. En esta ocasión bajo la batuta de Jay Faerber.

Y ya desde el primer episodio quedó patente que el Genio! detras de éxitos imperecederos del noveno arte como Noble Causes no había perdido su toque para humanizar a los personajes y que iba a llevar a los guerreros por su propio sendero sin por ello ignorar la intensa labor de caracterización que habían llevado a cabo sus antecesores.

Pues nada más comenzar la primera aventura...

...Namorita demuestra que es una pesada y una rencorosa al volver a echarle en cara a Nova su supuesto abandono unos meses antes. A lo que Rich, demostrando su madurez y equilibrada psique, responde con gran dignidad que no va a permitir que Nita le someta a un chantaje emocional.

Y, a pesar de que ella no se lo merece por su infantil y desequilibrada conducta, Nova la continua tratando como si de una compañera más se tratara.

Jay nos demuestra que ante la irracional conducta que suelen adoptar las mujeres frente a una ruptura la mejor respuesta es una estoica paciencia, que las pobres en el fondo no tienen la culpa de ser víctimas de sus hormonas.

Pero Namorita, siempre temperamental...

...sigue rumiando su injustificable rencor durante muchos episodios.

Una mala leche crónica que afecta hasta a sus relaciones con los demás guerreros. Porque fíjense ustedes en qué cara me pone cuando Bolt confiesa que se está muriendo del virus del Legado:

Ampliación:

Puro sadismo.

Suele pasar con las mujeres que lo han pasado mal por culpa (real o imaginaria) de un hombre. Los odian a todos por extensión y cuando un compañero de equipo te confiesa que se muere no puedes evitar una sonrisa de arpía al pensar que pronto habrá un hombre menos sobre la Tierra.

Pero no sólo de dramas personales e histerias vive el fan. Los Nuevos Guerreros Faerberianos también viven aventuras de incesante acción.

E, inevitablemente, son capturados y tienen que soportar cómo el villano se vanagloria de tenerlos indefensos.

Que en esta ocasión le toca a Namorita...

...pero que le podía haber tocado a cualquier otro Neoguerrero, que ha sido pura casualidad.

Y además sabemos positivamente que no es un *gasp* estoy indefensa porque el villano es de sexo femenino, y si es una mujer no cuenta.

Si hasta ella lo sabe, y es por esto que cuando Nova, demostrando nuevamente su madurez y su desinteresada generosidad, acude a rescatarla...

...ella se limita a darle las gracias educadamente como una señorita en lugar de los refunfuños y borderíos habituales.

Si, queridos lectores. Jay escribe personajes veraces que evolucionan, y Nita no es una excepción. Con el paso del tiempo ha ido superando el irracionalñ odio que la reconcomía.

Bueno, con el paso del tiempo y con la ayuda de la única cosa que puede centrar a una mujer.

...¡dejarse de chorradas y buscarse un novio, coño!

Pero ¡OJO! Que tiene que ser un buen chico y, sobre todo, que sea formal, decente y que venga con buenas intenciones, como en este caso en que el afortunado es Johnny Storm alias la Antorcha Humana.

Porque aunque a estas alturas Nita haya aprendido a mantener las piernas cerradas como una buena chica, alguna de sus compañeras todavía no lo ha hecho.

Como Turbo.

Que todavía no sabe que los chicos malos están por todas partes, que incluso aparentan ser formales investigadores de incendios.

Pero que si eres una fresca y te dejas bajar las bragas...

...descubrirás que en realidad es otro lobo con piel de cordero que sólo quiere aprovecharse de tu vulnerabilidad de mujer. Que por algo se le llama sin bragas y a lo loco, tía.

Y, nuevamente...

...son sus compañeros guerreros quienes pagan las consecuencias de la casquivana conducta de Turbo.

Pero aquí es donde Jay traza una hermosa y preciosista metáfora moral, pues el objetivo final de Firestrike...

...es robarle a Turbo su sofisticada armadura, cosa que logrará cuando ella se desnude para él, tanto física como espiritualmente.

¡Aprende a escribir tebeos con mensaje, Jack Chick!

Pero, justo cuando la tragedia parece cernirse irrevocablemente sobre nuestra descarriada jovenzuela...

...las flechas de Cupido hacen su efecto y Firestrike cambia de opinión rindiendose al amor.

¿Así que la historia de Turbo y Firestrike tiene un final feliz, os preguntais?

¡Por supuesto que no!

Ella acaba descubriendo su identidad y, pese a que él traiciona a sus compañeros delincuentes, acaba en la carcel.

Turbo acaba sola y llorando.

¡POR GUARRA!

Pero la carrera de Nita estaba destinada a abarcar más etapas y a ser guiada por todavía más guionistas, giros del destino que seguiremos explorando en la siguiente entrega de... ¡Mujeres Refrigeradas!

3 comentarios:

J Calduch dijo...

Noble Causes, esa interesante mezcla del género de superhéroes y el de marujas ¿cómo no se ha terminado de publicar en castellano?

Necio Hutopo dijo...

La verdad es Firestrike se enamoró perdidamente de Turbo por la forma en que ésta agarraba la zanahoria... Las viñetas no mienten

Anónimo dijo...

Las metáforas zanahoriles están a la orden del día.