Vivo en un barrio acogedor y tranquilo, igual que mi edificio. Con excepciones.
Está el director de la inmobiliaria a nivel de calle, que habla solo. Te lo cruzas día tras día y piensas que está hablando por auriculares. Incluso los domingos cuando aparece y se mete en el despacho a hacer nadie sabe qué. Hasta que un día te das cuenta de que no lleva auriculares cuando habla. Bueno, y también está lo de que ladra...
Y luego está el vecino del cuarto. Vive de algún tipo de pensión y cada mediodía espera a que su hermana le traiga la comida en la esquina de casa. Hace ruido caminando con fuertes pasos y moviendo muebles y practicamente todos los días, a primera hora de la tarde, pone música.
Siempre una misma canción repetida una y otra vez. A veces una versión de Pongamos que Hablo de Madrid de Rosario, otras veces el Everybody's Talking About Me.
De vez en cuando grita. Si no sabes que es él podrías creer que es una discusión callejera. Hasta que te das cuenta. En alguna ocasión se ha puesto en el balcón gritando y lanzando libros y ha habido que llamar a la policía. Sin embargo, aparte de todo eso, jamás ha tenido un problema con ningún otro vecino y todos insisten que es pacífico y que sus ataques sólo se producen dentro de su casa (de hecho nunca pone música a horas intempestivas).
Hasta este último mes.
Durante estas semanas los ruidos y los gritos son casi continuos y más enfurecidos que nunca. Hubo que volver a llamar a la policía pero se ve que si unos niñatos montan una fiesta puedes tirar la puerta abajo pero si un enfermo mental tiene un atque y no te abre no puedes.
A estas horas ya lleva más de 24 horas ininterrumpidas. El proceso es siempre igual: pasos fuertes en dirección a la cocina o el dormitorio, golpes y gritos.
Es un pobre enfermo y la culpa no es suya, claro. Lo es de la gente que lo ha dejado ahí tirado y con quienes hasta ahora no hemos podido contactar. Parece que ningún organismo se puede hacer cargo de él. Ni siquiera sabemos si es que no está atendido o simplemente pasa de tomarse la medicación.
Esta mañana ya ha salido gritando a la escalera, y eso es nuevo.
lunes, 23 de enero de 2012
Abandono.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
tio,ponlo en tuiter! ahi está todo el mundo,alguien seguramente sepa qué se puede hacer,pobre hombre :S
Publicar un comentario