lunes, 15 de octubre de 2012

Del Poder y de la Responsabilidad

Pocos ejemplos hay en el mundo de la ficción cuatricómica de sacrificio tan constante y abnegado como el de nuestro amistoso vecino, Spider-Man.

Tan palpables como incontables son los ejemplos de ello. Novias muertas, palizas, amigos e incluso familiares convertidos en archienemigos, palizas, rechazo de la opinión pública, persecución policial, palizas, casi-muertes, más amigos convertidos en archienemeigos, acoso público, palizas, matrimonios e hijos borrados de la continuidad... ¿ya he mencionado las palizas?

Pero nada, NADA de ello ha hecho que el trepamuros cejara en su permanente lucha contra el mal. Bien sabe Stan Lee que numerosas han sido las ocasiones en que la duda le ha asaltado e inculos más de un amaho de retirarse de la profesión ha hecho.

Pero, cual vocacional torero, siempre ha vuelto a enfundarse las mallas.

Porque la máxima que le guía es el inmortal "un gran poder conlleva una gran responsabilidad".

Y ante tan absoluto principio todo sacrificio es pequeño.

Incluyendo terribles sacrificios imprescindibles para el desarrollo de su actividad. El doloroso precio que ha tenido que pagar para poder saltar de tejado en tejado con la aparente agilidad proporcional de una araña. Una verdad oculta que sólo ahora, gracias a cierto juego de tablero...



...sale a la luz en toda su punzante gravedad.

1 comentario:

Necio Hutopo dijo...

Sí, bueno, es lo que tiene que te desaparezcan a la esposa supermodelo de la continuidad, que ya no mojas y se te acumula...