martes, 23 de julio de 2013

Érase una Vez la Jenny

Garth Ennis' Jennifer Blood, la serie de Garth Ennis que no escribe Garth Ennis, sigue adelante inasequible al desaliento.

Aquellos necios que pensaron que con el cierre del arco argumental de venganza principal las andanzas de la Jenny iban a llegar a su fin no contaron con las ansias de pasta la inces ante creatividad de los pringados encargados de estirar el chicle prorrogar sus aventuras.

Sí, hay vida para la Jenny.

Vida carcelaria, concretamente.

Y claro, yo se que muchos de vosotros teneis una idea MUY equivocada de cómo es el interior de una prisión de mujeres. Yo no sé qué películas veis pero aparentemente os pensais que todo es cachondeo, duchas comunes y consumo de marisco.


En realidad una prisión femenina tiende a ser mucho peor que una cárcel para hombres.

Para empezar un recluso rival puede violarte sin vaselina o arrancarte una oreja de un mordisco pero NUNCA te dirá que el uniforme te hace el culo gordo.


Y para continuar algunos de los más peligrosos reclusos de todo el sistema penitenciario son mujeres.


Curtidos malhechores cuya carrera criminal se remonta al lejano pasado. Y cuando digo lejano...


...quiero decir LEJANO DE LA HOSTIA.

3 comentarios:

Necio Hutopo dijo...

Ya decía yo que esa nariz me parecía conocida...

Bac Hylon dijo...

Voto taquiones!!

Sauron Bloom dijo...

Tiñoso y Nabot, que recuerdos...